Como buena amante del mundo de la belleza en general y de los potingues en…
Dos aliados perfectos para plantarle cara a la celulitis este verano
Continúo con mi particular batalla contra la celulitis. La verdad es que trato de combatirla durante todo el año con dieta sana, ejercicio y cosméticos, pero para qué os voy a engañar, como nos ocurre a la mayoría, soy mucho más constante durante el verano, concretamente en cuanto veo que tengo que enfundarme el bañador y sacar mis carnes al sol.
Quiero compartir con vosotras mis dos grandes aliados de este año. Por un lado sigo fiel al Aceite Anticelulítico de Abedul de Weleda. Lo descubrí el año pasado (ya os hablé de él) y me va de maravilla. Me lo aplico todas las mañanas nada más salir de la ducha y me doy un pequeño masajito con la ventosa que incluye su pack de dos aceites. Es un producto que me resulta súper agradable y que realmente noto los resultados. Combinar su fórmula natural con el masaje “al vacío” hace que retenga mucho menos líquidos y que la piel de naranja vaya reduciéndose considerablemente. ¡Me encanta! Su textura es muy agradable y, a pesar de ser un aceite, se absorbe con mucha rapidez y no deja manchas en la ropa.
Por otra parte, me he sometido a un par de sesiones de Ondas de Choque y estoy encantada. Se trata de un procedimiento para eliminar celulitis, reafirmar y elevar glúteos, piernas y brazos. Yo lo he probado en glúteos y lo noto un montón. Nada más terminar la sesión ya se aprecia la piel mucho más suave y tersa y conforme pasan las horas se nota como la zona está mucho más lisa y elevada. ¡Me encantan los resultados!
Este procedimiento se realiza con el Swiss Cellvibe, el primer dispositivo médico de clase llb aprobado para su uso por un esteticista en Clínica, Instituto de belleza o SPA. Dispone de un compresor que consigue generar la mayor energía, en el aplicador para Estética, del mercado.
Este aparato genera unas ondas acústicas que se aplican a los tejidos consiguiendo reducir la apariencia de la celulitis y mejorar el aspecto de la piel en cuanto a elasticidad y firmeza. Y, lo que es más importante, sin provocar daños cutáneos.
La profesional programa la intensidad adecuada de la onda de choque teniendo en cuenta diferentes parámetros y aplica el cabezal sobre la zona a tratar durante el tiempo recomendado (suele ser de unos 10 minutos aproximadamente por cada zona). La sensación es muy agradable, se nota un poco de calor y un pequeño cosquilleo.
Os recomiendo que lo probéis. Merece la pena. Si os animáis podéis acercaros a Boris y Saky, pues lo tienen en su carta de tratamientos. El precio de la sesión suelta ronda los 70 €. También existen bonos que incluyen más sesiones y abaratan el tratamiento.
Lo ideal es hacerse una o dos por semana durante las tres primeras semanas y, después, hacer alguna sesión recordatorio una vez al mes para mantener los resultados.
Cómo combatís vosotras la celulitis? ¿Habéis probado alguna de estas dos propuestas? ¿Qué os parecen?