Sé que muchas de vosotras buscáis cosméticos bio para cuidar vuestra piel, así que no…
Tres marcas de cosmética y sus historias
Hoy voy a hablaros de tres marcas de cosmética muy distintas entre sí: Caudalie, Sederma y Cumlaude, las tres con su propia y genuina historia detrás. Crean productos para que estemos más guapas o al menos más cuidadas, así que si las quieres encontrar al mejor precio y tener una experiencia óptima de venta las puedes comprar en Farmaciamarket, la parafarmacia de referencia en la red.
Hablamos mucho de que la belleza se encuentra fuera y también dentro -y esto último es algo que solo se puede comprobar a través de las acciones de cada uno-. El caso es que las que soy clienta de Caudalie porque me gustan los productos naturales y la marca se sirve de los nutrientes de la vid, tenemos también a mano una historia muy bonita, de gente bella por fuera y por dentro.
Se trata de su creadora, Mathilde Thomas, una francesa nacida en Grenoble en el año 1971, cuya biografía sólo se entiende si se habla también de su marido y socio, Bertrand Thomas, creador como ella de la marca. Junto a un investigador farmacéutico, a mediados de los noventa, patentaron métodos para extraer y usar en sus cosméticos, resveratrol, polifenoles y viniferina de la vid después de comprobar sus efectos sobre la piel.
Nadie lo había hecho nunca antes y el resultado fue espectacular, la marca fue creciendo como la espuma y los productos y resultados los tenemos hoy aquí, a mano.
De hecho el negocio empezó gracias a un préstamo familiar y hoy la pareja factura miles de millones de euros, pero no era esta a la belleza de dentro a la que me refería, si no a que la historia de la pareja y de su marca se escribe en base a una ética que va muy ligada a la tendencia actual, hacer productos naturales y comprometerse con el medio ambiente.
Excelente relación calidad – precio para el cuidado de la piel
Los polifenoles de la uva son unos estupendos antioxidantes, aunque también encontrareis quien prefiera antioxidantes más agresivos sobre la piel. Sobre gustos no hay disputas y menos por lo que se refiere a los productos de belleza, porque por mucho que se hable de grupos de pieles determinados: secas, grasas o mixtas, la verdad es que cada crema se adapta a cada tipo de piel de un modo distinto.
El cofre spa de Caudalie es una maravilla y los precios no son baratos pero entran dentro de la media y son excelentes en su relación calidad precio.
A algunas nos encantan las historias humanas que hay detrás de cada marca cosmética
Sin embargo no todos la cuentan y es normal. Se trata de comerciar, no de airear la vida privada-, aunque también hay quien basa el marketing sobre ellas. En el caso de Sesderma quién hay detrás es un doctor, Gabriel Serrano, que ha conseguido consolidar una marca con más de 27 años, – basándose en el compromiso que tienen los médicos hacia sus clientes y se ha rodeado de un equipo donde todos lo son.
Las cremas y demás productos de Sesderma van a buscar la eficacia y a combatir los problemas más usuales de la piel,y lo cierto es que muchos de los productos que hacen han obtenido premios ofrecidos por los mismos profesionales.
Ahora se puede escoger entre más de 400 de estos productos y con precios más ajustados. El Doctor Serrano y su equipo cuentan con estudios contrastables en los que se demuestra que los liposomas o burbujas lipídicas de sus productos atraviesan las capas de la piel y es ahí donde el doctor basa buena parte de la eficacia de sus productos, en que los principios activos de estos trabajan más, mejor y por más tiempo.
No se trata de convencer a nadie sino de describir los productos cosméticos que marcan tendencia y lo hacen desde hace tiempo. Se trata de grandes marcas que a lo mejor no tienen el predicamento de las famosísimas pero si cuentan con un público fiel que las defiende a capa y espada, que al final es el gran anhelo de todas las marcas, tener acérrimas defensoras sus beneficios. La verdad es que se vende mucho por el boca oreja, al menos entre amigas y conocidas, sobretodo si quien recomienda una crema tiene la piel en perfecto estado.
Una marca encumbrada que se vende por sí sola
La otra marca de la que vamos a hablar hoy es Cumlaude, toda una líder del sector farmacéutico que brilla por sí misma y de la que no se conoce quién hay detrás.
El equipo de Cumlaude ha dejado lo personal de lado para trabajar su éxito, que es algo muy típico de las marcas encumbradas, focalizar lo meramente funcional. Cumlaude también es especialista en el sector ginecológico, donde encontrar geles de higiene femenina que son toda una maravilla y por lo demás se vende sola -una oferta o promoción de Cumlaude dura pocos minutos en pie-.
A falta de una historia humana esta compañía cuenta con unos valores en los que basa su trabajo: calidad, innovación, confianza y las personas.
Haz una compra inteligente y encuentra lo que buscas en un plis
Sobre todas estas marcas y más, -pero estas en especial-, vais a encontrar ofertas ideales en Farmaciamarket, la parafarmacia que se ha hecho un gran hueco en la red y ha sabido fidelizar a sus clientes, algo bien difícil en Internet.
La atención es estupenda pero además poder perderse en su catálogo como quien pasea y mira los estantes de una parafarmacia física es una experiencia de compra genial. De este modo se van conociendo productos que no conocías, cotejando precios y demás, pero si eres de las que van con prisa, puedes hacer una búsqueda inteligente y encontrar lo que necesitas en un plis.
Los envíos a partir de compras superiores a 75 euros son gratis y la mayoría de nosotras sabemos qué añadir para llegar a la cifra si no nos pasamos de ella, porque al comprar en una parafarmacia online de esta magnitud aprovechas para adquirir, además de productos cosméticos, los de la higiene y cuidado de bebés o los complementos alimenticios y deportivos.
También cuentan con medicamentos que no necesitan prescripción facultativa, una sección de salud sexual y otras ofertas que te alegran el día, además de la sección de marcas donde comprar yendo al grano. Así que se acabó lo de hacer colas o de tener que ir a comprar ajustándose a los horarios de los comercios.