Rinoplastia ultrasónica, el método más preciso y menos molesto para remodelar la nariz

¿Siempre has querido retocarte la nariz y no te decides a hacerlo por miedo al quirófano y a la inflamación y las molestias propias del postoperatorio? Ha llegado el momento de que dejes de darle vueltas a este tema. La cirugía estética avanza a marchas forzadas y va desarrollando tecnología y protocolos cada vez menos invasivos, que permiten que el paciente se recupere en un tiempo récord de cualquier intervención o tratamiento.

¿Has oído hablar de la rinoplastia ultrasónica? Es posible que te suene a ciencia ficción, pero se trata de una nueva herramienta de ultrasonidos que permite remodelar el hueso de la nariz con mayor precisión, para reducir los moratones, los edemas y la hinchazón. Una técnica puntera que solo está disponible en los mejores centros de cirugía estética y que permite conseguir un resultado más estético y una recuperación mucho más rápida. El paciente puede retomar sus actividades diarias en mucho menos tiempo que con la rinoplastia convencional.

Se puede decir que estamos ante el método más avanzado que se utiliza en las cirugías de remodelación de la nariz, ya que resulta menos traumático y ofrece mejores resultados. De ahí que este método esté siendo implantado por clínicas de todo el mundo.

Diferencias de la rinoplastia ultrasónica y la rinoplastia tradicional

Seguro que te estás preguntando en qué se diferencian la rinoplastia ultrasónica y la de toda la vida. Te cuento… Principalmente en las herramientas que se utilizan durante el proceso. Para empezar, en la rinoplastia convencional se usan escoplo, martillo y lima para remodelar los huesos de la nariz y estos instrumentos pueden causar inflamación y moratones en el postoperatorio. En la rinoplastia ultrasónica se emplea un bisturí ultrasónico (llamado Piezotome), que trabaja con mucha más precisión, evitando producir lesiones en los tejidos blandos y, por tanto, reduciendo considerablemente la aparición de los desagradables moratones post quirúrgicos.

Otra diferencia a tener en cuenta es el postoperatorio de ambos procedimientos. Tras una rinoplastia normal generalmente tendrás que pasar una noche en el hospital y tardarás entre dos o tres semanas en recuperar tu ritmo habitual y el resultado final puede alargarse hasta un año. En el caso de este innovador sistema, la recuperación es mucho más breve y favorable. El paciente puede regresar a su casa en cuanto se pasen los efectos de la anestesia y probablemente pueda volver a su actividad cotidiana en seis o siete días.

En ambos casos, el paciente deberá tomar medicación durante la primera semana para prevenir infecciones, inflamación y molestias  propias de los primeros días. También deberá mantener hidratada la zona nasal con lavados muy suaves con suero fisiológico. Y, por supuesto, nada de ejercicio físico hasta que el profesional que haya llevado a cabo la intervención así lo considere.

Beneficios de la rinoplastia ultrasónica

Como puedes imaginar, la rinoplastia ultrasónica ha supuesto todo una revolución en las intervenciones nasales, no solo por estética, sino también por cualquier disfunción. Entre los beneficios que más destacan de esta técnica se encuentran:

1-Es un método mucho menos invasivo que la rinoplastia tradicional.

2-Se produce menos sangrado.

3-Resulta menos dolorosa y causa menos inflamación.

4-La recuperación del paciente es más rápida, más cómoda y menos molesta.

5-Permite remodelar los huesos de una forma más precisa.

6-Los resultados son muy naturales, con menos irregularidades y asimetrías.