Prepara la piel para tus vacaciones con el exfoliante corporal de Sabon

Tener una piel uniforme y libre de impurezas es la clave para que cualquier tratamiento penetre bien sobre ella y funciones. ¿Y qué hay que hacer para conseguirlo? Pues muy sencillo, recurrir a un buen producto cosmética para exfoliarla sin causar irritación. Yo lo hago por lo menos una vez a la semana y os garantizo que se nota. En breve publicaré un post hablando de mis exfoliantes corporales favoritos, pero hoy quiero centrarme en uno de mis últimos descubrimientos: el Body Scrub de Sabón. Es una auténtica delicia…

¿Cuáles son las propiedades del Body Scrub de Sabon?

Esta sal marina procede del Mar Muerto y está enriquecida con aceites naturales de almendra y de jojoba. Además, contiene omega 3,6 y 9; vitamina E; y minerales. ¡Su contenido en minerales es hasta 10 veces superior a cualquier otra sal marina! En resumen, un cóctel perfecto para alisar, purificar y nutrir la piel una o dos veces a la semana.

Los suaves granulados de esta sal eliminan las células muertas y renuevan la piel, dejándola suave y sedosa, sin causar ningún tipo de irritación. No obstante, no resulta nada agresivo; al contrario, se trata de un tratamiento perfecto para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles, con eczemas y psoriasis.

Un gran aliado para el bronceado

A pesar de que mucha gente sigue pensando que al exfoliar la piel, arrastramos el bronceado, lo cierto es que productos como éste son los que ayudan a conseguir un moreno bonito, uniforme y muy duradero. ¿Por qué? Muy sencillo: una piel lisa y libre de impurezas permite que tanto los rayos del sol como los productos utilizados antes y después de la exposición solar penetren mejor y accedan a capas más profundas de la piel. De esta forma, los protectores solares actuarán correctamente, previniendo cualquier mancha, rojez o quemadura, y los “after sun” conseguirán hidratar la piel y sellar el bronceado.

¿Cómo se utiliza?

No necesitas invertir más de 1 o 2 minutos para utilizar este exfoliante. Lo ideal es aprovechar el momento de la ducha para aplicártelo, darte un masaje y aclararlo. ¡La piel queda impecable!

Se recomienda lavar la piel bien con jabón y, después, aplicar una cucharada de producto con movimientos circulares. Se puede utilizar 1 o 2 veces por semana. Es importante no aplicar en rostro ni heridas.

Tras disfrutar de este agradable procedimiento, es aconsejable aplicar un producto hidratante, anticelulítico, reductor… según cada caso concreto. No tiene sentido utilizar ninguno de estos tratamientos sin haber exfoliado el cuerpo con regularidad, ya que no penetraría de forma adecuada y, por tanto, no se conseguiría el resultado deseado.

Mi veredicto: al menos una vez a la semana utilizo un exfoliante facial y otro corporal. Este ritual forma parte de mi rutina beauty desde hace varios años y creo que es fundamental para mantener la belleza de mi piel. ¡Se ha convertido en una verdadera necesidad para mí”! Este producto me ha gustado mucho porque no solo exfolia y arrastra la suciedad y las células muertas, sino que deja una película hidratante sobre la piel súper agradable. ¡Por no hablar del delicioso aroma que deja en el cuarto de baño!

¡Súper recomendable!

¿Algun@ de vosotr@s ya lo ha utilizado?

Espero vuestras impresiones.